lunes, 10 de agosto de 2015

Día 7, Campo de Trabajo San Gil Placeat 2015, 8-8-2015

Hola soy una de las voluntarias de San Gil de este año, me llamo Idoia García y vengo de Haro (La Rioja)
Comenzamos el día como todos los demás días con un amanecer muy particular Alicia despertándonos con el megáfono alternándolo con la cacerola y el cazo, de ahí fuimos a desayunar como cada mañana  cada uno según iba acabando se fregaba  su tazón y cucharilla seguido lo dejaba secar en la encimera del fregadero.
Nos montamos por grupos en las furgonetas para recoger a los usuarios e irnos de excursión al Parque  Nacional de Monfrague, Reserva de la Biosfera. Ahí nos recibió la directora de este para hacernos de guía por el parque donde pudimos ver Águila Real, Águila Imperial, Lechuzas, Buitres Leonados, Nutrias entre otros animales que estaban haya algunos viviendo definitivamente, otros de rehabilitación. Cada uno tenía su historia que te conmovía, algunos fueron abandonados por su madre al haber sido acariciados por los humanos, otros por accidentes en el vuelo, donde unos se quedaron sin una de las alas, otro ciego y así muchos casos diferentes pero no por ello menos impactantes, tristes, aunque tuvieron suerte por ser recogidos y tener alguien que los rehabilite con cariño, con las atenciones que requieren y necesitan.
De ahí nos fuimos a nuestro siguiente destino donde realizamos una pequeña ruta al Castillo situado en el punto más alto de Monfragüe, donde estuvimos viendo las vistas que le rodeaban, un lago que se diversificaba varias veces formando casi isletas, el entorno era muy bonito de esos que te dejan la boca abierta donde nos hicimos fotos en lo alto del torreón. 
Seguidamente  descendimos por la umbría para llegar a la fuente del francés donde me quede rezagada con Alicia una de las Monitoras que íbamos recogiendo papeles y basura que veíamos, casi nos caemos varias veces pero salimos sin rasguños gracias a dios, nos daba apuro seguir la recogida porque nos estaban esperando el resto de compañeros en los merenderos donde íbamos a comernos el bocata, para coger fuerzas, refrescarnos un rato y renovar las energías gastadas, mientras los monitores iban a por las furgonetas que quedaron arriba en el parking del castillo. 
Por último nos fuimos a dejar a los usuarios a la Residencia donde también cenamos antes de irnos a la Finca unos a dormir y otros a seguir con la fiesta hasta que les entrasen ganas de irse a dormir.

Fue un día muy completo y genial.

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