El cansancio ya va aumentando en nosotros pero aun así la sonrisa no desaparece
de nuestro rostro . No madrugamos, toca un día más flexible. Nos dedicamos a
las tareas domésticas diarias y después nos dirigimos a Plasencia a comer con
nuestros queridos usuarios , y así reponemos fuerzas para continuar la tarde
con divertidas actividades.
Esta vez toca tomar rumbo hacia una piscina natural situada
en Plasencia llamada “Isla”donde
disfrutamos del fresquito de los árboles y la tranquilidad del ambiente
, charlando y contando las experiencias de todo lo vivido aquí . Queda poco
para el final y la pena ya se va reflejando en nosotros y en nuestros usuarios.
Nos cuesta convencerles para que prueben el agua y al final lo conseguimos,
conseguimos ver esa sonrisa que día a día nos transmiten.
Tras el baño, toca momento furgoneta dirección al parque de
los patos. Vemos preciosos pavos reales, patitos, pollitos… Mereció la pena
visitar aquel parque, los usuarios lo disfrutaron mucho y nos echamos unas
risas. Marcha hacia Placeat, los usuarios necesitan un descanso. Nosotros
visitamos la iglesia de la Virgen del Puerto y continuamos hacia lo más alto,
el precioso mirador.
Inmediatamente vamos a cenar, ya había hambre!Se nos va una
compañera lo cual toca despedida por parte de ella con los usuarios,
sentimientos a flor de piel.
Llega la noche, toca reunión en nuestra querida finca, hay
que ir dándole comienzo al final de esta preciosa aventura. Muchos sentimientos
juntos dieron fin a este bonito día. Las luces desaparecen
y el silencio se apodera de la finca".
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